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Titulo
Ulises Gallegos
Escenario
En el año 2030, 10 años después del primer caso de COVID 19 en México, las empresas retomaron sus actividades normales en las oficinas, sin embargo, nada regreso a la normalidad. Gran porcentaje de la población se infectó por lo que quedaron con secuelas como migrañas intensas, dificultad respiratoria y anosmia. Los pocos que no se contagiaron, desarrollaron trastornos mentales debido a los 3 años de encierro bajo los que vivieron. Al acabar la pandemia todos volvieron a tener contacto físico, sin embargo, no se tenía en cuenta que al bajar las defensas todos eran más susceptibles a contraer nuevos virus y bacterias, por lo que las medidas de sana distancia se implementaron nuevamente. Desaparecieron los empleados mayores a 60 años en las empresas ya que gran parte de ellos fallecieron, o se “jubilaron” debido al riesgo que generaban para la empresa. Los contratos a largo plazo quedaron en el olvido, todos trabajan como out-sourcing, las empresas ya no quieren tener nada que ver con el servicio médico de sus empleados, pues la seguridad social es cada vez más cara.
El mundo va más rápido, todas las interacciones se llevan por redes sociales, y la falta de contacto físico ocasionado por el distanciamiento, así como la ausencia de contratos a largo plazo, nos ha hecho seres más independientes. Gracias a los tiempos de encierro ocasionados por el COVID 19, la tecnología avanzó de manera más rápida, y los espacios de trabajo dejaron de ser espacios físicos, por lo que las horas de trabajo dejaron de importar, y la gente trabaja por objetivos virtuales definidos por las plataformas de las compañías.
Gracias al tiempo que las personas pasaron encerradas, el índice de natalidad se elevó en la década del 2020, por lo que la población aumentó de manera exponencial y los espacios comenzaron a reducirse. Es por esto que las empresas optaron por descentralizarse, y alejar sus oficinas de las grandes ciudades. Una época de migración hacia otros estados, el inicio de una redistribución de los espacios sociales.
Concepto
Esta prenda mantiene un monitoreo constante de los signos vitales del portador a través de sensores de frecuencia cardiaca, niveles de oxígeno, temperatura, y lectura de electrocardiograma, determinando el porcentaje de riesgo del usuario y mantenerlo alejado de situaciones o usuarios que podrían presentar un peligro para su salud.